EN EL ARMARIO DE MI CONCIENCIA
Estoy contenta:
todo está en su sitio,
la luna haciendo su recorrido,
el boniato en el horno,
y cada uno de los cuatro colores
del parchís, sumando puntos.
Estoy contenta:
apenas encontré erratas
en este domingo,
los cordones umbilicales
latieron con el ritmo acompasado
a la hora prevista.
Estoy contenta,
perdonadme por ello.
¿Es lícito estar contenta
cuando tantos seres humanos
están sufriendo, careciendo,
bajo esta misma luna
sobre este misma tierra…?
Perdonadme por ello,
perdonadme,
por agarrarme a mi trocito de presente,
por llegar a la alegría
como quién llega a una cima difícil,
como quién encuentra un tesoro ansiado,
como quién consigue resolver un enigma.
Estoy contenta:
progresa adecuadamente
mi camino hacia el centro.
Estoy contenta:
porque doblé mis sentimientos
y los tengo –aquí y ahora,
ya veremos otro día-
ordenados y planchados
en el armario de mi conciencia.
apenas encontré erratas
en este domingo,
los cordones umbilicales
latieron con el ritmo acompasado
a la hora prevista.
Estoy contenta,
perdonadme por ello.
¿Es lícito estar contenta
cuando tantos seres humanos
están sufriendo, careciendo,
bajo esta misma luna
sobre este misma tierra…?
Perdonadme por ello,
perdonadme,
por agarrarme a mi trocito de presente,
por llegar a la alegría
como quién llega a una cima difícil,
como quién encuentra un tesoro ansiado,
como quién consigue resolver un enigma.
Estoy contenta:
progresa adecuadamente
mi camino hacia el centro.
Estoy contenta:
porque doblé mis sentimientos
y los tengo –aquí y ahora,
ya veremos otro día-
ordenados y planchados
en el armario de mi conciencia.